Sí, has leído bien, estás a punto de descubrir una receta infalible. Si la sigues, te permitirá no tener que volver a preocuparte nunca más de tener trabajo, porque siempre habrá un sitio para ti en alguna parte.

Son solo 4 elementos los que necesitas:

  1. No dejes nunca de aprender cosas nuevas: no quiere decir solo a que estudies y te formes, sino a que tengas curiosidad, que quieras experimentar cosas nuevas, que no tengas miedo a hacer cosas diferentes por primera vez. Nunca dejes pasar una oportunidad de hacer algo diferente a lo que estás haciendo ya bien.
  2. Trata bien a las personas que tienes a tu alrededor: ayúdales siempre que puedas, comparte con generosidad tus conocimientos y experiencias, muéstrate siempre amable y con espíritu colaborador, empatiza con quienes son diferentes.
  3. Suda la camiseta del equipo: esfuerzo, dedicación, constancia, son conceptos que hay quien dice que están pasados de moda, pero son fundamentales en la vida. Los sueños no se alcanzan desde el sofá de casa, las cumbres no se ganan solo deseándolo en Facebook.
  4. Practica la “libresponsabilidad: tengas el rol que tengas en tu organización, y sea esta del tamaño que sea, practica la responsabilidad y la libertad, comprometete al máximo, trata de alcanzar la mayor autonomía posible y promueve que las personas con las que trabajan también lo hagan.

Si practicas estas cuatro “reglas”, te puedo asegurar que cualquier empresa querrá tener a una persona como tú entre sus miembros; o, si lo prefieres, serás capaz de desarrollar por tu cuenta un proyecto empresarial junto a otras personas.